vamosadar-salud-1

René Ramírez y sus dos hijas son beneficiarios de la Jornada de entrega de sillas de ruedas, que realizamos del 7 al 11 de septiembre. Ellos son originarios de la comunidad de San Miguel del Centro perteneciente al municipio de San José del Rincón, Edo. de Méx. René vive actualmente con su esposa Antonina quien vela por él y sus hijas ante su situación de salud: él padece de Esclerosis Múltiple; sus dos hijas, Janeth y Rosa Isela, de nacimiento padecen distrofia muscular. En el caso de los tres miembros de esta familia, su condición les impide caminar y hacer su vida con libertad.

A pesar de cualquier limitante, su deseo por permanecer juntos y seguir avanzando nos tocó las fibras más sensibles. Queremos presentarte el caso de esta noble familia, es una historia que nos ha movido para lograr mejorar su calidad de vida.

 

Un hogar modesto.

vamosadar-salud-2

René y su familia viven en una pequeña casa de dos cuartos, en donde uno de ellos es ocupado para que duerman los cuatro en una misma cama matrimonial; sin embargo Antonina su esposa, en ocasiones debe dormir en el piso… porque ya no caben.

La cocina cuenta con lo básico y solo tiene una estufa Patsari elaborada por Vamos a Dar; en esa estufa, Antonina prepara la deliciosa comida y las tortillas calientes que sirve para su familia día a día. El baño de la casa tampoco ha sido terminado, le falta la taza, el lavabo y la regadera. Toda la casa está construida con tabiques y con un aplanado de loza, los únicos muebles que tienen son una pequeña pantalla para entretenerse y dos mesitas de madera que ocupan para colocar platos y otras cosas.

Podrás notar que el hogar de René y su familia es humilde; sin embargo fue construido con mucho esfuerzo y cariño por su papá, el Sr. Esteban Ramírez, para que toda la familia pudiera tener independencia. Debido a su condición actual, el Sr. Esteban se está haciendo cargo de René (además de su propia familia), él les da de comer y aporta todo el recurso económico para las consultas médicas de René.

Antonina, no puede salir a trabajar debido a que ella es quien cuida a su esposo y sus hijas; tan sólo se ayuda con un dinero que recibe de sus familiares, que son entre 20 y 50 pesos una vez al mes; de peso en peso, Antonina ahorra con esmero ese dinero para comprarle ropa a sus hijas y a su esposo. La condición de salud que afecta a René ha cambiado su vida y la de su familia entera.

 

Su padecimiento lo afectó desde que era joven.

René se encuentra en silla de ruedas desde que tenía 22 años. Antes de comenzar con los síntomas de su padecimiento, su trabajo como ayudante de albañil -en el Distrito Federal-, era el sustento de su familia, pero desafortunadamente a esa joven edad quedó en cama sin  poderse mover.  Los doctores le diagnosticaron Esclerosis Múltiple, aunque no estaban totalmente seguros sobre lo que había causado su enfermedad.

 

La atención médica de René y sus hijas.

El proceso de atención de René comenzó con consultas médicas constantes a las que tenía que asistir en la Ciudad de México. En cada terapia le aplicaban tratamientos y le recetaban medicamentos que no tenían efecto. Por esa razón lo canalizaron a otra clínica en la Ciudad de Toluca (Edo. de Méx.); el medicamento que ahí le recetaron hasta la fecha ha tenido buenos resultados. El estado físico actual de René sólo le permite tener movilidad limitada desde la cintura hacia arriba y en cuanto al habla, puede estructurar oraciones para tener conversación, aunque ésta no es muy clara.

A las dos pequeñitas, cuando comenzaron con los síntomas se les hicieron varios exámenes para saber qué enfermedad tenían, pero los resultados nunca se los entregaron. Los médicos argumentaban que “el expediente no había llegado”. Tiempo después, en otra clínica les diagnosticaron con “Distrofia Muscular”, pero no tuvieron el seguimiento necesario por la falta de recursos.

 

Nuestra contribución para transformar la vida de René y su familia.

vamosadar-salud-3

Para poder desplazarse, originalmente, René contaba con una silla de ruedas en malas condiciones, que a penas le daba el soporte suficiente para permanecer sentado. Por su parte, a Janeth y Rosa, el DIF de San José del Rincón les había entregado un par de sillas de ruedas que tuvieron que abandonar tan pronto crecieron, lo que les ocasionó un desgaste físico considerable.

Su condición ahora es muy diferente a partir del donativo de la actriz y productora Gaby Arroyo, a quien seguimos agradeciendo profundamente el haber mostrado un gran corazón y humildad para poder ayudar a 20 personas, quienes como René y sus hijas necesitaron de aparatos ortopédicos (sillas de ruedas, muletasy andaderas) para poder devolverles la movilidad que habían perdido.

Para quienes formamos parte de Vamos a Dar siempre habrán motivos para mover voluntades, pues siempre hay alguien que lo necesita. #MéxicoNecesitaMásDe ti, de tu compromiso y de tus ganas de mover al mundo.

liga-donativos

Views – 1627